Clase climática en equipos de refrigeración: todo lo que debes saber

Hoy queremos hablaros de la importancia de la Clase Climática a la hora de adquirir un equipo de refrigeración. A veces, justo después de haber comprado e instalado un equipo podemos experimentar falta de potencia en determinados momentos o condensación de agua en ciertas superficies. Aunque las causas podrían ser problemas internos o una mala instalación, a menudo, son consecuencia de la elección de la Clase Climática.

¿Por qué existe la clase climática?

Es muy difícil diseñar un equipo de refrigeración que trabaje a pleno rendimiento en cualquier condición climática externa. Normalmente, se diseñan para trabajar en unos husos de temperatura y humedad que, aunque amplios, no abarcan todos los climas. Así, si el equipo se ve obligado a trabajar en condiciones muy alejadas de sus estándares, puede dar problemas.

Ese es el motivo por el que los equipos de refrigeración como los armarios expositores se identifican por su Clase Climática, una clasificación normalizada que debe aparecer en las características técnicas del equipo que aporta el fabricante. En este sentido, existen 2 tipos de clase climática en función de si el equipo es profesional o doméstico.

Clasificación climática en equipos profesionales

En el caso de los equipos profesionales la Clasificación Climática utiliza una escala numérica del 0 al 8 que indica las condiciones de temperatura y humedad óptimas para el funcionamiento del equipo. Sin embargo, debemos tener en cuenta que no indica el margen de error superior o inferior que, de desviarse las condiciones, podría generar un mal funcionamiento. Antes de comprar cualquier equipo de refrigeración, observa si se adapta a la clase climática.

Clase climática en equipos domésticos

Por lo que respecta a los equipos domésticos, utilizan un código de letras que clasifica todos los equipos en 4 grupos. En estos casos, la clase climática puede ser: SN, N, ST, T. Aunque indica los campos de temperatura de trabajo en los que los equipos tienen un funcionamiento adecuado, no contempla la humedad del ambiente.

Ten en cuenta la clase climática antes de realizar tu compra

Así pues, la Clase Climática no es, en ningún caso, un detalle menor a la hora de decidirse por un modelo u otro. Debemos ser conscientes de que las características de la máquina siempre deben adaptarse a las exigencias climáticas del ambiente en el que trabajará, si no lo hace, esta puede ser una explicación de porqué tu nevera, o cualquier otro equipo doméstico, enfría poco.